Horario: Lunes a Viernes de 10:00 a 19:00 hrs. Alonso de Córdova 2791-C, Vitacura
0 Carrito
Añadir al carrito
    Tiene artículos en su carrito
    Tiene 1 artículo en su carrito
    Total

    KETO BLOG — keto

    Los Beneficios de Suplementarse con Proteína de Suero de Alta Calidad: Una Visión Científica

    Los Beneficios de Suplementarse con Proteína de Suero de Alta Calidad: Una Visión Científica

    Los Beneficios de Suplementarse con Proteína de Suero de Alta Calidad: Una Visión Científica

    La proteína de suero ha ganado gran popularidad en las últimas décadas, no solo entre atletas y culturistas sino también entre aquellos que buscan mejorar su salud general. Obtenida de la leche durante el proceso de fabricación de queso, la proteína de suero es a menudo elogiada por su impresionante perfil de nutrientes y posibles beneficios para la salud. Este artículo profundiza en los beneficios respaldados científicamente de suplementarse con proteína de suero de alta calidad.

    1. Fuente de Proteína de Alta Calidad

    El suero es considerado una proteína completa, lo que significa que contiene los nueve aminoácidos esenciales. Estos aminoácidos son los componentes básicos de las proteínas y son esenciales para la reparación y crecimiento muscular. Debido a su contenido de proteína de alta calidad, el suero puede ser beneficioso para aquellos que intentan ganar masa muscular o mantener músculo mientras pierden peso1.

    1. Apoya el Crecimiento Muscular

    Se ha demostrado que la suplementación con proteína de suero es particularmente efectiva para promover el crecimiento muscular cuando se consume después del entrenamiento. Su rico contenido en leucina, un aminoácido de cadena ramificada (BCAA), juega un papel fundamental en la síntesis de proteínas, crucial para el crecimiento muscular2.

    1. Ayuda en la Pérdida de Peso

    Estudios sugieren que la proteína de suero puede ayudar en la pérdida de peso al reducir el apetito e incrementar la sensación de saciedad. Esto puede llevar a una disminución en la ingesta total de calorías, promoviendo la pérdida de peso3. Además, puede ayudar a retener la masa muscular durante una dieta restringida en calorías, asegurando que la pérdida de peso provenga principalmente de las reservas de grasa4.

    1. Rica en Antioxidantes

    La proteína de suero es una fuente importante de cisteína, un aminoácido que produce glutatión, uno de los principales antioxidantes del cuerpo. Los antioxidantes combaten el estrés oxidativo y protegen contra enfermedades crónicas. Un aumento en los niveles de glutatión puede potenciar las defensas antioxidantes del cuerpo, ayudando en la prevención de enfermedades5.

    1. Apoya la Función Inmunológica

    La suplementación con proteína de suero puede fortalecer el sistema inmunológico, especialmente durante períodos de entrenamiento intensivo. Esto se debe en parte a su capacidad para elevar los niveles de glutatión, que juegan un papel crítico en la función inmunológica6.

    1. Reduce la Presión Arterial

    Estudios han vinculado el consumo de productos lácteos con una reducción de la presión arterial. La proteína de suero, en particular, contiene péptidos bioactivos llamados lactoquininas, que han mostrado potencial en la reducción de la presión arterial[^7^].

    1. Ayuda a Manejar los Niveles de Azúcar en Sangre

    El consumo regular de proteína de suero puede ayudar a reducir los picos de azúcar en sangre después de las comidas, convirtiéndola en un suplemento beneficioso para aquellos con diabetes tipo 2. Cuando se toma antes de comidas ricas en carbohidratos, puede promover la secreción de insulina y ayudar en la gestión de los niveles de azúcar en la sangre[^8^].

    Conclusión

    La suplementación con proteína de suero de alta calidad ofrece una multitud de beneficios para la salud, desde promover el crecimiento muscular y la pérdida de peso hasta fortalecer la función inmunológica y las defensas antioxidantes. Sin embargo, como con todos los suplementos, es esencial asegurarse de que la fuente sea de alta calidad y consultar a un profesional de la salud antes de comenzar cualquier rutina de suplementación.

    Referencias:

    1. Phillips, S. M., & Van Loon, L. J. (2011). Necesidades dietéticas de proteínas para atletas: desde requerimientos a adaptación óptima. Revista de ciencias del deporte, 29(sup1), S29-S38.
    2. Churchward-Venne, T. A., Breen, L., Di Donato, D. M., Hector, A. J., Mitchell, C. J., Moore, D. R., ... & Phillips, S. M. (2014). La suplementación con leucina de una bebida de macronutrientes mixtos baja en proteínas mejora la síntesis de proteínas miofibrilares en hombres jóvenes: un ensayo clínico doble ciego y aleatorizado. The American journal of clinical nutrition, 99(2), 276-286.
    3. Veldhorst, M. A., Westerterp-Plantenga, M. S., & Westerterp, K. R. (2009). Gluconeogénesis y gasto energético después de una dieta sin carbohidratos y alta en proteínas. The American journal of clinical nutrition, 90(3), 519-526.
    4. Pasiakos, S. M., Cao, J. J., Margolis, L. M., Sauter, E. R., Whigham, L. D., McClung, J. P., ... & Combs Jr, G. F. (2013). Efectos de las dietas altas en proteínas sobre la masa libre de grasa y la síntesis de proteínas musculares después de la pérdida de peso: un ensayo controlado aleatorizado. The FASEB Journal, 27(9), 3837-3847.
    5. Townsend, D. M., Tew, K. D., & Tapiero, H. (2003). La importancia del glutatión en la enfermedad humana. Biomedicina y farmacoterapia, 57(3-4), 145-155.
    6. Walsh, N. P., Gleeson, M., Shephard, R. J., Gleeson, M., Woods, J. A., Bishop, N. C., ... & Simon, P. (2011). 

     

     

    Magnesio: Un mineral Esencial!

    Magnesio: Un mineral Esencial!

    Magnesio: Un Mineral Esencial para la Salud Óptima**

    El magnesio es a menudo un mineral crucial subestimado requerido para una amplia gama de funciones corporales. Componente indispensable en más de 300 reacciones bioquímicas en el cuerpo humano, su importancia es innegable.

    (1). Este artículo busca arrojar luz sobre la esencialidad del magnesio, las diversas formas en las que se presenta, y el papel multifacético que desempeña en nuestro cuerpo, todo respaldado por estudios científicos.

    Magnesio: El Mineral Esencial Olvidado

    El magnesio, aunque es un actor principal en diversos procesos biológicos, no suele ocupar un lugar central en las discusiones sobre nutrición. Es fundamental en la regulación de diversas reacciones bioquímicas en nuestros cuerpos, incluyendo la producción de energía, síntesis de proteínas, contracción muscular, función nerviosa, control de la glucosa en sangre, y regulación de la presión arterial (2).

    No se limita a eso, el magnesio es fundamental en la síntesis de ADN, ARN, y el potente antioxidante glutatión. Contribuyendo a la estructura de los huesos y desempeñando un papel integral en la conducción del impulso nervioso, el magnesio también asegura el mantenimiento de un ritmo cardíaco saludable y fortalece el sistema inmunológico (3).

    Comprendiendo los Diferentes Tipos de Magnesio

    Existen numerosos tipos de magnesio, cada uno mostrando beneficios únicos y usos distintos: 

    Citrato de Magnesio: Conocido por su biodisponibilidad, el citrato de magnesio es uno de los tipos más prevalentes. Puede mejorar la digestión y se utiliza a menudo para tratar el estreñimiento debido a su efecto laxante (4).

    Glicinato de Magnesio: Esta forma, ligada al aminoácido glicina, muestra una excelente absorción. Al ser suave con el estómago, es ideal para aquellos con digestión sensible (5).

    Óxido de Magnesio: A pesar de tener un alto porcentaje de magnesio elemental, su biodisponibilidad es menor. A menudo se recomienda para el alivio de la indigestión y la acidez estomacal (6).

    Cloruro de Magnesio: Procedente del mar, el cloruro de magnesio se absorbe y metaboliza fácilmente. Se utiliza con frecuencia tópicamente en lociones y aceites para el alivio muscular (7).

    L-treonato de Magnesio: Esta nueva forma de suplemento de magnesio destaca por sus capacidades para mejorar la cognición, gracias a su capacidad para cruzar eficazmente la barrera hematoencefálica (8).

    **Magnesio: El Maestro de los Procesos Metabólicos**

    Vamos a profundizar en los diversos roles que desempeña el magnesio en el cuerpo:

    - **Salud Ósea:** Alrededor del 60% del magnesio se encuentra en los huesos. Es fundamental en el desarrollo de una estructura ósea saludable e influye en las actividades de los osteoblastos y osteoclastos, células que regulan la formación y reabsorción de hueso, respectivamente (9).

    - **Función Muscular:** Además de ayudar a la contracción y relajación muscular, el magnesio juega un papel en la reducción de los calambres y la tensión muscular (10).

    - **Regulación del Sistema Nervioso:** El magnesio es crucial para la regulación de los neurotransmisores, los mensajeros químicos del cerebro. Desempeña un papel clave en la conducción de los impulsos nerviosos (11).

    - **Salud del Corazón:** Como parte del sistema de conducción eléctrica del corazón, el magnesio ayuda a mantener un ritmo cardíaco regular, contribuyendo significativamente a la salud cardiovascular (12).

    - **Regulación del Estado de Ánimo:** Los estudios han relacionado los bajos niveles de magnesio con un mayor riesgo de depresión. Como actor crítico en la función cerebral y la regulación del estado de ánimo, mantener niveles adecuados de magnesio puede ayudar a manejar la depresión y la ansiedad (13).

    - **Control del Azúcar en Sangre:** El magnesio juega un papel vital en la regulación de los niveles de insulina y glucosa, impactando en la gestión de la diabetes tipo 2. Los estudios han mostrado que las personas con baja ingesta de magnesio tienen un mayor riesgo de diabetes (14).

    En conclusión, la importancia del magnesio, abarcando numerosas funciones y procesos corporales, es indudable. Entender los diferentes tipos de magnesio puede ayudar a los individuos a optimizar su salud según sus necesidades específicas.

    **Referencias:**

    1. de Baaij, J. H. F., Hoenderop, J. G. J., & Bindels, R. J. M. (2015). Magnesio en el hombre: implicaciones para la salud y la enfermedad. Revisiones Fisiológicas, 95(1), 1-46. https://doi.org/10.1152/physrev.00012.2014
    1. Grober, U., Schmidt, J., & Kisters, K. (2015). Magnesio en prevención y terapia. Nutrientes, 7(9), 8199–8226. https://doi.org/10.3390/nu7095388
    1. Schwalfenberg, G. K., & Genuis, S. J. (2017). La importancia del magnesio en la atención sanitaria clínica. Scientifica (El Cairo), 2017, 4179326. https://doi.org/10.1155/2017/4179326
    1. Lindberg, J. S., Zobitz, M. M., Poindexter, J. R., & Pak, C. Y. (1990). Biodisponibilidad del magnesio a partir de citrato de magnesio y óxido de magnesio. Journal of the American College of Nutrition, 9(1), 48–55. https://doi.org/10.1080/07315724.1990.10720349
    1. Coudray, C., Rambeau, M., Feillet-Coudray, C., Gueux, E., T

    LA IMPORTANCIA DEL OMEGA 3

    LA IMPORTANCIA DEL OMEGA 3

    Los ácidos grasos omega-3 son un grupo de ácidos grasos esenciales que son vitales para la salud humana. Estos ácidos grasos no son producidos por el cuerpo humano y deben obtenerse a través de la dieta o suplementos. Los tres tipos principales de ácidos grasos omega-3 son el ácido eicosapentaenoico (EPA), el ácido docosahexaenoico (DHA) y el ácido alfa-linolénico (ALA).

    Numerosos estudios científicos han investigado los beneficios para la salud de los ácidos grasos omega-3. Uno de los beneficios más conocidos es su capacidad para reducir el riesgo de enfermedades del corazón. Un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition encontró que consumir ácidos grasos omega-3 puede reducir significativamente el riesgo de enfermedad coronaria en un 35%. Otro estudio publicado en el Journal of the American Medical Association encontró que la suplementación con omega-3 redujo el riesgo de ataques cardíacos fatales hasta en un 45%.También se ha demostrado que los ácidos grasos omega-3 tienen propiedades antiinflamatorias. La inflamación crónica se ha relacionado con una amplia gama de problemas de salud, incluidos el cáncer, la artritis y los trastornos autoinmunes.

    Un estudio publicado en el Journal of Nutrition encontró que la suplementación con omega-3 redujo la inflamación en el cuerpo y mejoró la función inmunológica en general.Además de sus propiedades antiinflamatorias, los ácidos grasos omega-3 también son importantes para la salud del cerebro. Un estudio publicado en el Journal of Neurochemistry encontró que la suplementación con omega-3 mejoró la función cognitiva y redujo el riesgo de deterioro cognitivo en adultos mayores. Otro estudio publicado en el Journal of the American Medical Association encontró que los ácidos grasos omega-3 eran efectivos para tratar la depresión en adultos.

    Los ácidos grasos omega-3 se encuentran en una variedad de alimentos, incluidos los pescados grasos como el salmón, el atún , así como en nueces y semillas como las semillas de linaza y las semillas de chía. Sin embargo, muchas personas no consumen suficientes ácidos grasos omega-3 en su dieta, por lo que los suplementos pueden ser beneficiosos.

    En general, la investigación científica sobre los ácidos grasos omega-3 es clara: ofrecen una amplia gama de beneficios para la salud y son esenciales para una salud óptima. Incorporar alimentos ricos en omega-3 en tu dieta o tomar suplementos puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, reducir la inflamación y mejorar la función cognitiva, entre otros beneficios.
    Referencia y estudios:
    1. Mozaffarian, D., et al. (2005). "Fish Intake, Contaminants, and Human Health: Evaluating the Risks and the Benefits." American Journal of Clinical Nutrition, 82(2), 483-494. https://doi.org/10.1093/ajcn/82.2.483
    2. Burr, M. L., et al. (1989). "Lack of Benefit of Dietary Advice to Men with Angina: Results of a Controlled Trial." European Journal of Clinical Nutrition, 43(9), 605-614. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/2586548
    3. GISSI-Prevenzione Investigators. (1999). "Dietary Supplementation with N-3 Polyunsaturated Fatty Acids and Vitamin E after Myocardial Infarction: Results of the GISSI-Prevenzione Trial." Lancet, 354(9177), 447-455. https://doi.org/10.1016/S0140-6736(99)07072-5
    4. Calder, P. C. (2006). "n-3 Fatty Acids and Inflammation: From Molecular Biology to the Clinic." Lipids, 41(9), 783-792. https://doi.org/10.1007/s11745-006-5037-5
    5. Meydani, S. N., et al. (1993). "Immunologic Effects of National Cholesterol Education Panel Step-2 Diets with and without Fish-Derived N-3 Fatty Acid Enrichment." Journal of Nutrition, 123(4), 654-661. https://doi.org/10.1093/jn/123.4.654
    6. Yurko-Mauro, K., et al. (2010). "Beneficial Effects of Docosahexaenoic Acid on Cognition in Age-Related Cognitive Decline." Alzheimer's & Dementia, 6(6), 456-464. https://doi.org/10.1016/j.jalz.2010.01.013
    7. Su, K.-P., et al. (2003). "Omega-3 Fatty Acids in Major Depressive Disorder: A Preliminary Double-Blind, Placebo-Controlled Trial." European Neuropsychopharmacology, 13(4), 267-271. https://doi.org/10.1016/S0924-977X(03)00032-4

    ¿Cómo contribuir al correcto funcionamiento del cerebro?

    ¿Cómo contribuir al correcto funcionamiento del cerebro?

     

    La buena alimentación es un aspecto de la vida que muchas veces es olvidado, de hecho, una mala nutrición puede ser un factor directamente proporcional para desarrollar enfermedades de salud mental como la depresión. Por ello, se recomienda el consumo de alimentos con altos niveles de Omega-3 para su prevención.

     

    Junio 2022 -. No es desconocido que comer de forma saludable puede traer diversos beneficios para el estado físico y la salud en general. Pero ¿se tiene conocimiento de cuál es la relación entre una nutrición balanceada y la salud mental? En este caso, la respuesta no resulta tan obvia. De hecho, en abril de 2005 el hospital McLean, afiliado a la Universidad de Harvard, realizó un estudio sobre este fenómeno, siendo el resultado bastante sorprendente, ya que se demostró que para tratar enfermedades como la depresión ciertos alimentos son más efectivos que las pastillas.

     

    Para Bárbara Álamo, organizadora de Keto Stgo, el evento más importante de Chile dedicado a la alimentación cetogénica y salud metabólica, “el estilo de vida de una persona va a repercutir absolutamente en su salud mental, y en este caso las grasas son esenciales para el ser humano, tanto para el cerebro como para el sistema inmune”.

     

    Por otro lado, “la psiquiatría metabólica con especial énfasis en intervenciones como el ayuno intermitente, la prescripción de alimentación cetogénica y la reducción terapéutica de carbohidratos, está demostrando ser una respuesta actualizada, con evidencia científica sólida, y ensayos clínicos emergentes que validan y respaldan su utilización como una herramienta crucial del sistema de salud para atender la crisis sanitaria en expansión”, advierte el Dr. Ignacio Cuaranta, médico psiquiatra.

     

    Es por esta razón, que los expertos y las investigaciones advierten que los ácidos grasos como el Omega-3 son capaces de reducir los síntomas de la depresión en igual o incluso mayor medida que tres diferentes medicamentos que se utilizaron para el estudio.

     

    “Tener buenos hábitos es esencial, ya que las emociones y el funcionamiento cerebral están 100% vinculados. Una persona que no se expone a la luz solar, no hace ejercicio y tiene malos hábitos alimenticios, probablemente es más propenso a depresiones, cambios de humor y declive cognitivo hacia la vejez”, explica Álamo. Por lo tanto, al contrario de lo que se cree, incorporar buenas fuentes de grasa es clave, como, por ejemplo, el Omega-3 que se encuentra en alimentos como el salmón, las nueces, la palta, el aceite de oliva, entre otros.

     

    Asimismo, gracias a los resultados de un estudio llamado: “Changing Diets, Changing Minds”, se pudo comprobar que existe un amplio rango de nutrientes que resultan indispensables para la salud mental, ya que al combinarlos entre sí permiten al cerebro desarrollarse y funcionar adecuadamente. En este caso, una dieta rica en proteínas, vegetales y grasas saludables como nueces y semillas, ayuda a mantener nuestro organismo saludable y nos protege de ciertas enfermedades. Por el contrario, el hecho de mantener una dieta con elementos que no contienen nutrientes esenciales puede afectar el funcionamiento de nuestro cerebro. “Tenemos que pensar que nuestro cerebro es una masa compuesta por grasa (colesterol) por lo que es errado pensar que menos grasa es mejor, en cambio consumir salmón, nueces, palta, aceite de oliva, sin duda va a ser bueno. Eso sí, la cantidad es muy relativo a cada persona”, señala la experta.

     

    En esta ocasión una de las dietas más recomendadas por los expertos es la dieta Keto o cetogénica, ya que el cuerpo utiliza la grasa como energía, eliminando el consumo de azúcar, siendo este unos de los mayores problemas para la salud mental por la gran adicción que genera. Por otro lado, las cetonas son excelentes señalizadores para todo el funcionamiento neuronal, logrando que las personas estén más lúcidas y concentradas.

     

    El azúcar es considerado uno de los alimentos que más afecta al funcionamiento del cerebro, de hecho, según datos de la OCDE, un 74% de la población adulta y un 52% de los niños tienen sobrepeso u obesidad, además, según la Encuesta Nacional de Salud 2019, una de cada cinco personas ha tenido una enfermedad mental durante el último año.

     

    Si bien es cierto, la alimentación es un factor bastante relevante para prevenir cualquier tipo de enfermedad de salud mental, existen distintos factores que en conjunto con una buena dieta pueden prevenir estas patologías, siendo clave un buen dormir, la hidratación, realizar actividad física, exponerse correctamente a la luz solar, meditar, tener buenas relaciones interpersonales y un continuo contacto con la naturaleza, entre otros.

     

    El cerebro humano tiene requerimientos nutricionales bastante especializados, lo que implica que un buen estado nutricional es de suma importancia para la salud mental, ya que “si la calidad de los alimentos es mala podrá contribuir al desarrollo de alguna patología, como, por ejemplo, la depresión”, concluye Bárbara Álamo.